La voz de las cosas

Herlyng Ferla
Cali, ago. - sep. 2016

Interferencias físicas

Siempre me han incitado los emprendimientos absurdos, los objetivos para utilizar un lenguaje científico —así todos me malentienden— condenados por el modelo que los ordena. Sólo, si son consecuentes con mi asombro, puedo soportar la idea de proyección y callar mientras escucho ciegamente la lógica de la empresa y sus lineamientos prospectivos. Me he impuesto una regla intuitiva, si recuerdo algo conocido, si reconozco un sentido inmediato, si antes o después voy a entenderlo de una misma manera, debo parar. Es mejor no perder el tiempo en eso. Imaginé que éste iba a ser el camino optimista, el lenguaje parecía darme la razón, seguir el rastro de una palabra confirma el delirio de cualquier modelo. La transparencia del modelo es una infamia y su mayor encanto es el fraude de la partes que lo conforman y la potencia de su materia.

En una alargada corta visita me habló de un posible acercamiento a la arqueología, yo pensaba en dos palabras que me había dicho: metafísica concreta. Solo puedo imaginar el ejemplo del último apartado en el Diccionario de la lengua española del significado en desuso de la palabra si: “10. No habla solamente de Dios, si también de las criaturas”. Tuve que pensar en el tiempo que había trascurrido y en todo lo que podía pasar hasta ocupar el espacio en el edificio de oficinas.

Disfruté la aceleración del efecto de olvido de lo que está en uso, a través de los malentendidos de los procedimientos con la materia. Los sinónimos de la palabra malentendido resultan elocuentes: equivocación, error, tergiversación, desvío, alejamiento falta, desliz… (sería mas pertinente un diagrama imposible, con infinitos caminos que amplíe la reducción de la enumeración)… caída, traspié, descuido, inadvertencia, distracción, anacronismo, despiste, extravío, desviación, desatino, disparate, aberración, despropósito.

Nunca he hecho un sample1 del sonido de una nevera. No utilizo sonidos concretos, solo sonidos de síntesis, donde lo real nunca ha estado o ya ha desaparecido. Busco sonidos de congeladores en Internet, pero pierdo el tiempo leyendo una entrada de Google. El título que encuentro afirma: “Resuelto el misterio de los RUIDOS extraños de su refrigerador: Los científicos finalmente descifran por qué en la noche hace tanto ruido”.

Me acuerdo del video que me mostró en el encuentro y sigo leyendo:

“Ingenieros ponen sensores en las neveras domésticas para identificar los ruido. Los sonidos son más aleatorios que los zumbidos de los ventiladores y los compresores. El estudio halló culpable al esfuerzo causado por los cambios rápidos de temperatura. Los paneles de plástico alrededor de calentadores en neveras anti-congelantes, crean la mayoría de los ruidos”.

Y por último leo las falsas promesas: “Los investigadores dicen que sus hallazgos podrían ayudar a diseñar aparatos más silenciosos”.

En el taxi recuerdo la paranoia de la herencia de los proscritos, me gusta esta ciudad próxima al océano Pacífico. Pienso en Paul, el sobrino de Wittgenstein deambulando las calles de Viena en su afirmación de la demencia y en Erdosain, especulador de inventos, arrebatado en la alucinación de los detalles de una conspiración en las reuniones con el astrologo, en una casa de Buenos Aires en la novelas Los siete locos y em>Los Lanzallamas…

¡Cuánto tedio el de las resoluciones reales! Prefiero la irradiación de las interferencias en el espacio físico y viceversa2.

 

Camila Corredor

 


Notas

1 Captura (muestra) de un sonido grabado en cualquier tipo de soporte digital.

2 Cosa, dicho o acción al revés de lo que lógicamente debe ser o suceder.

Créditos

Exposición
La voz de las cosas

Fechas
Agosto 24 – Septiembre 23, 2016

Lugar
(bis) | oficina de proyectos
Calle 23 Norte 6AN-17, oficina 412
Cali, Colombia

Artista
Herlyng Ferla

Escritora
Camila Corredor

Agradecimientos
Verónica Lehner